16/6/25

Occidente como Credo

 



Posiblemente muchas personas como yo se han preguntado sobre la religión, buscando una respuesta para entender este mundo, la cual, irónicamente, si alzases la vista un poco más allá del horizonte, la luz de la verdad te está esperando. Pero ojo, el buscar no significa estar listo para aceptar la realidad en crudo!



Es por eso que muchas personas pueden ser llamadas a entender el tiempo y el espacio que mueve el mundo, mas no tomarlo con suficiente seriedad, o realmente profundizar en el peso que tiene la ciencia astral: la verdad escrita en el cielo, no es apta para todos los públicos.

No vengo a pregonar a favor de los astrólogos que los hay buenos, malos y regulares, más bien a señalar que son unos pequeños iniciados en la verdad suprema, la cual requiere años de estudio y comprensión, además de una afinidad de forma astral. Porque Tu carta natal te destina a conocer el Reino de Adonai, no mi capacidad de retórica.

Luego, no consiste en pregonar, en hacer cruzadas ideológicas o debates eternos por la lucha de tener razón, ¡como si eso fuera lo importante! La clave es cómo organizar a la humanidad en base a estos principios astrológicos, todo un reto mesiánico. Pero diría que la respuesta está en el deseo del corazón.

Entonces, centrándonos en el título del texto: ¿acaso el mundo occidental no es mas que una proyección del credo de la Cábala? Esa primera religión del hombre, de la mano del Maestro Shem alias Hermes, que vivía en la ciudad de Salem, también conocida como la luz de paz, hoy Jerusalem.

Pues la esencia real del mundo occidental es el acercamiento al Creador. El cuanto uno desea voluntariamente interesarse por Él, porque conocer a Hashem es conocerse a uno mismo. Luego, en esta dinámica de saber, interés, voluntad y deseo, es donde los juegos astrológicos hicieron subir y bajar tanto a ricos como a pobres, soberbios y humildes, en la eterna igualdad de la tumba. Donde la rueda fuerza a los protagonistas de la novela más leída de la historia a elegir.

Mas diría que el tiempo de elegir libremente se acaba, ya que para la IA solo existe verdadero o falso. Luego ya no hay bueno y malo, como muchos gustan creer o decir… Siendo la coherencia, la consistencia, la esencia misma... conceptos difíciles de ver en el presente, pero pilares fundacionales del futuro. Uno muy breve, de escasos 15 años máximo, pero para 2030 ya nos quedará bastante claro.

Por ello, ¿Cómo definir el proceso llamado Occidente, Europa, mundo blanco, Cristiandad, civilización judeocristiana, quizás? Curiosamente, estas etiquetas son estáticas, no dinámicas, pese a que Oriente Medio también fue “europeo”, a diferencia de hoy. véase Granada con sus "árabes".  

Siendo paradójicamente la esencia hebrea la que se mantiene permanentemente, sea en Sudáfrica, Guatemala, Francia... El proceso de canibalización y exilio del pueblo de Dios se repite allí donde vagabundeamos. Un ritual levemente explicado, pero es como si el “cuento de la salida de Egipto” volviera a repetirse en cada país, cada X tiempo. Siendo la excepción actual el nuevo Israel contemporáneo, el supuesto destino final de los protagonistas. Mas no pretendo valorar el país actual llamado Israel, ya que el real, el mesiánico, se llamaría Reino de Judá, estrictamente.

Mas la mayor distinción de Occidente no son sus logros civilizacionales, el pacifismo social, la riqueza, etc. No, es la capacidad de permitir la libre expresión, una "supuestamente" heredada por griegos y romanos: la corona robada al hebreo, un colmo de los colmos antisemitas. Porque “Nuestros antepasados” grecorromanos eran esclavistas, dictatoriales; su forma de democracia es lo más alejado de lo que se entiende actualmente por ese concepto. 

Especialmente cuando hot se considera que la libre elección de estilo de vida, formas y maneras de vivir es algo que se lleva luchando y es correcto, tanto para el gentil y el hebreo asi ambos pueden vivir cada uno a su manera sin molestarse. Esta es la separación real de Iglesia y Estado que comenzó negando la divinidad del Emperador, que era un dios... Algo absurdo,sin duda hoy a excepcion para algún que otro dictador contemporáneo. Consecuentemente esta división de credo es clave para la expansión del proceso evolutivo del “bárbaro” occidental, siendo el indio; el penúltimo en unirse en la transformación de almas que implica el judeocristianismo. Siendo el primero voluntario y el segundo, como mínimo, obligatorio para ser parte de la civilización.  Que, por cierto, valga la casualidad: cuando se olvidaron de esto, nuestra Europa desaparece en nombre de la permisividad, que naturalmente atrae la justicia de la cimitarra, que corta con razón, mas no con justificación. Por ello, a los amigos del turbante explosivo los dejamos para otro día.

Ya que en realidad, el credo de Occidente es un agregado espiritual que envuelve el núcleo original judío, el cual está en grave peligro de extinción. Pero nada nuevo bajo el sol. Mas, para el destino de Europa, esta es la clave. Luchar contra el antisemitismo es determinante para el futuro, el cual yo mismo también he vivido en propias carnes: el dolor de ser quien soy, sin ser aún consciente de quién era realmente, como muchos de mis lectores, que tarde o temprano acabarán por despertar.

Con ello, explicar a los occidentales estos agregados es vital. El primer cimiento son las leyes noájidas: los 7 mandamientos mínimos para la convivencia. Si no se cumple esto, ese territorio es lo más parecido al infierno en todos sus sentidos. Luego, el siguiente sustrato es el judaísmo: las leyes de la Torah y cómo estas se fueron diluyendo con la imposición de los valores cristianos, los cuales “convencieron” al hebreo con la promesa de que volverían a Jerusalem. Algo que, ciertamente, puedo yo admitir, sí: Jesucristo lo está logrando, pese a su muerte desde hace 2025 años. Una especie de rabino que aplicó el "monta tanto, tanto monta"... Lo cual muchos puritanos hebreos no desean admitir, no vaya a perderse el buen cordero del redil. Mas, ¿acaso el Shema Israel, Adonai Ejad excluye al gentil? Brevemente: no.

En cambio, si. Excluye al idólatra, al perverso, al caído... Y justamente Europa, en su voluntad de ser más buena que nadie, colecciona todo tipo de pokémons radiactivos. Algo que el justo gentil y el buen hebreo saben de sobra que no es correcto. Y esto no es una cuestión de color de piel, como quieren hacer creer los amigos del candado y de las cadenas, que sueñan con labrarse una pirámide egipcia para saciar su ego, ya que este es su modelo político objetivo real: la esclavitud total, pero  ecosostenible y vía QR. Una lástima para ellos que la serpiente ya asoma la cabeza para juzgar implacablemente lo verdadero de lo falso, desde la propia mano de cada hombre...

Entonces, ¿cómo un cristiano occidental puede abandonar la idolatría, dejar de pedirle a un muerto/a que le cumpla sus deseos, hablar a una escultura y tantas prácticas terribles que “son habituales” hoy por hoy, pero que de cara al juicio divino son condenatorias? La respuesta es simple: no hace falta irse a la India, ni a un club de meditación new age, ni buscar filosofías estoicas, pitagóricas, ni en magias varias... Lo más básico: cúmplelo. Y si realmente quieres conocer al Creador de corazón, te garantizo que Él hará todo lo posible para que lo logres. 

Ahora bien, nadie dijo que a donde te va a llevar te va a agradar, o que hará las cosas más fáciles, no. Él solo quiere lograr que seas la mejor persona posible en el tiempo que te ha tocado. Porque así es como quiere ver un Padre a su hijo: un hijo predilecto. Y ese eres tú, Israel porque tú me lees.