Posiblemente sea una de las mayor ofensas que una persona puede padecer, ya que es una negación en presente, futuro y pasado de esta.
Curiosamente esta pudiera pasar por desapercibida para muchos de los contemporáneos pero la sutileza de esta implica mucho mas de lo que se entiende. Ya que como dice Petosiris, sacerdote de Thot:
“Un hombre es revivido cuando su nombre es pronunciado“
Por lo tanto aquello que no puede ser pronunciado no esta vivo pero si es expresado si. Consecuentemente este entender ya viene a ser expresado por el propio Hashem. Cuando no llama a la serpiente por su nombre real, le llama Serpiente, por lo tanto la degrada.(Bereshit 3) Ya que no sabemos si se conocen o conocieron, pero si se deduce la actitud del creador ante esta, anonima castigadora.
Mas la gracia del asunto no termina aqui, esta continua con otro detalle, la primera pregunta del Genesis; -¿Donde esta Adam? (3:9) por parte de Adonay Kol Elohim, "Señor de Todas las Naturalezas" Con lo que se puede saber el nombre de una persona u entidad pero no su ubicación exacta, ¿Paradójico no? Sin duda, pero conecta con la propia imaginación, que ella misma tiene sus limitaciones propias de la consciencia del individuo, la cual proyecta en su mente aquello que conoce con su lenguaje. Con lo que a mayor lenguaje conocido, mayor capacidad de visualización que no de geolocalización, esta viene cuando se le llama en su justo tiempo.
Una vez sabido eso, nos toca aprender mucho.
Porque el nombre es mas que una etiqueta, es un acto de creación, ese soplo divino que separa la nada del todo. En el que el destino del reptil es la omisión absoluta Juicio Total y una advertencia para los hijos de Adam.
Ya que el opuesto del Amor es la indiferencia y del Odio es la compasión, luego ¿Quien se puede compadecer del reptil si se desconoce su nombre?
Por eso no todo debe ser nombrado, ni todo lo nombrado debe permanecer. Ya que hay nombres que otorgan vida, (JAIM) y hay otros que corrompen el mundo, que desfigura la santa creación divina, cambiando el lugar que corresponde a cada cosa. Con lo que el poder del lenguaje en su forma mas pura, no reside en la cantidad de palabras si no, la palabra exacta para cada momento.